Tu pesadilla comenzará cuando me muestre caprichoso con tu mente, anidé dentro de ti en el pasado y no dudaré en incubar el terror donde ya lo hice. Pagarás con tu sangre y aún así no desterrarás mi oscuridad. Te prometo que sin consuelo recorrerás este mundo, y ni hospitales ni médicos, ninguno de los que te estudiarán hallará el camino que te aleje de mí.
Soy pleno conocedor del caos que intentas ocultar, el experto guía en ese abismo de frustración. ¿No comprendes que te dará igual el silencio?, ¿no entiendes que será inútil aquella fortaleza que formaste alrededor de mi sinrazón?.
Aparecerán en la piel de tu imaginación remolinos de confusión y las imágenes que les mostraré a tus ojos aumentarán tu locura. Mediaré para que se acrecente el torbellino de tus contradicciones, no sabrás qué sentimientos habrá en ti, pues usaré malas artes.
Tal es el poso de mi conocimiento, tal la sabiduría de aquél que ya vivió lo que antaño no se leyó en ningún texto.
Te repito, sí, te repito que en tu cama la muerte acariciará tus sueños, mientras, todo a tu alrededor mentirá, nadie será en frente tuyo honesto y no habrá para ti en la calle ni comprensión ni bondad.
Mas no pienses que tienes una escapatoria creíble, pues no te queda más salida que la de dejarte llevar, no podrás abandonar la apatía ni mi abulia maldita, y así, día tras día juro que tu esperanza dentro de muy poco desaparecerá.
Ostentarás en tu rostro el amargor de las lágrimas y en tus puños habitará el odio y la resignación…Sé que volverás a aprender a querer lo que dentro de ti jamás has amado, y únicamente será realmente tuyo el insomnio, tuyo tan solo el espejismo de una existencia, pues mía será por entera, para mí es tu voluntad.
Haré que te inventes leyendas bajo sábanas de espanto y tu habitación será tu tumba. Quizá sientas que es esclava tu alma, mas no te preocupes, porque eso hará que yo pasee libre por tus venas, eso hará que yo viva a la vez que muere lo que hay de ti en tu interior.
Conseguiré que nadie pueda ver más letras que escribas, te hundiré en la pena y el cansancio. Todos te olvidarán y tan sólo quedará mi voz…
Para finalizar te puedo asegurar que en esta guerra no hay reglas, no hay crueldad. No existe el tiempo, tan solo encontrarás por sus inciertos recovecos sufrimiento y soledad.
(Los enemigos te dirán que no puedes con ellos, que no luches, pero yo ví con mis propios ojos que hubo gente que a este enemigo venció…)
ESCRITO EL 02/05/2017