Salgo a dar un paseo porque no me concentro, pienso en tus palabras, y siente cierto alivio mi pecho.
Los jardines hoy tienen un tono oscuro, los gorriones no emiten ningún canto, los árboles se muestran desnudos, y un crío corre detrás de unas palomas, las cuales emprenden raudas el vuelo. Mientras, el padre y la madre le contemplan, agarrados de la mano, observan con cariño aquello que han creado.
Mi cabeza en este momento parece confusa, mi pensamiento se ha extraviado por los montes de Toledo, en los que tu tienes tu hogar, y gracias a un trabajo tu sustento. Te recuerdo, y pienso en tus palabras, volviendo a sentir cierto alivio mi pecho.
Salgo de aquel lugar de reyes y dirijo mis pasos hacia un lugar mundano, en mi trayecto me topo con un vagabundo, tiene un traje sucio que está hecho harapos. No me mira, no me pide limosna, me pregunto si será tan desafortunada su vida, cuando me entran ganas de plasmar su historia, pues deseo escribirlas todas, con su plena crudeza, con sus alegrías y con sus penas, pero siempre intentando que sea con belleza.
Llego al bar y pido un café, evoco sin querer aquel relato que te gustó, y me vienen a la mente mis temas manidos de dolor y lamento, y también tu completa hermosura, reflejada en tu fiel persona, esa que a veces es dura conmigo, y otras se comporta como una dulce dama.
Me siento en una mesa, y sobre un papel relato esta historia, que a modo de carta, te agradece la sinceridad en tus palabras.
Porque tu, Cova, haces que sienta un agradable alivio en mi pecho, llenando mi corazón de un también por ti sincero afecto.
(DEDICADO A MI AMIGA COVA)
ESCRITO EL 10/02/2014.
Es realmente precioso, lleno de luz y ternura…yo aquí te muestro mi admiración…. y brindo porque tu amistad con Cova dure siempre, tan sincera y autentica….llena de momentos bellos
Me gustaMe gusta