OTRO ADIOS.

Días de palidez trasnochada,
de dolor en estas mis sienes marchitas,
cristales rotos de silencio por toda la almohada,
olor a despedida y azufre,
sabor a mi sangre que se derrama.

Ante mi espejo imploro mi cobardía,
aquella crueldad en la astucia que contienen tus labios,
esa ya pasada falsedad en el calor de nuestros abrazos,
y el anhelo de eternidad,
ese que solo encontraba yo al sentir las caricias y el cariño de tus manos.

Y te pido que me mientas,
que de frente me mires,
pobre de mi que soy un insensato,
ojo que busca en tu ojo,
algo olvidado que fue,
que tu pecho desprecia,
que pierde mi persona,
este cuerpo que sufre,
este espíritu que comprende que es el momento de decir adiós al amor
que tu ya no le otorgas.

En este amanecer se reseca mi boca,
no hay entre los dos más palabras,
compruebo triste que tu alma se halla en guerra contra la mía,
en conflicto está el paraíso que construimos,
a esta hora nuestro mundo se desmorona.

No me digas nada más que un descreído hasta luego,
cierra esta puerta
dándome una vana esperanza,
concedeme un falso consuelo,
por favor mienteme y dime que aún me quieres.

Escrito el 02/04/2015.

,

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s