Caminando transitas bajo la lluvia,
chaqueta al hombro
y sombrero calado.
Con tu mirada lejana y turbia,
mantienes con asombro
el instinto suicida y malvado.
Del rock and roll suave y violento,
de aquellos primeros años eternos.
En los que raudo como el viento,
deshacias cualquier consejo paterno.
Ahora tu linda Marilyn tienes por pareja,
y a una cría entre tus fuertes brazos.
Aquella balada de juventud suena ya vieja,
salvandote la vida de un duro mazazo.
Pues un existir completamente disoluto,
de pensamiento nihilista y disidente.
Hasta llegar al extremo del insulto,
se escapó de tu ya adulta mente.
Siendo ahora el responsable
y recto padre.
Que para cualquier niño es el deseable,
puesto que la alegría al pecho abre.
La velocidad de tu autopista,
dio un vuelco en hogareña prudencia.
Y la advenediza madurez volviose más lista,
apoderandose de tu cabal existencia.
Mas a veces en ti aún se descubre una mirada turbia,
cuando solitario se te ve transitar bajo la lluvia.
Escrito el 04/08/2013.