Hoy me pesa la vida…
Me pesa su lucha,
mis momentos de cobardía,
los reproches autoimpuestos,
las heridas que renacen,
y es que me duele mi alma,
y sin saber aún por qué
me pesa esta vida.
No me acostumbro
ni a su pulso
ni a su sabor,
no lo hago
a que mi mente
de tanto llenarla
se sepa vacía,
nunca entenderé nuestra avaricia
ni al que guarda rencor,
jamás comprenderé la necesidad
del orgullo
ni de la existencia de la mentira.
Vida que eres
de sombras y de luces,
no sé por qué a mí
a esta hora me pesas,
me rondan por las calles
tus espíritus y sus miserias,
mas sé que hay personas que todavía
merecen la pena.
Vida que apareces
con el frescor del rocío,
que te desparramas al aparecer el alba,
en mi tierra tus flores se muestran,
el rugir de mi mar al escuchar
tu nombre se calma.
Mas a pesar de los placeres
que nos otorgas,
a pesar de tu infinita belleza,
observan mis ojos confusos
este atardecer,
nota una lágrima mi piel,
veo en mi rostro marchito
hastío y aspereza….
Quizá sea por el veneno que recorre
el cuerpo enfermo de mi amada madre,
o porque comprendo que ese padre que me
educó está cada día más decaído y más viejo,
que ayer oí con dolor el delirar de mi abuela,
o porque el sol de mi ciudad hoy apareció
sin brillo.
Quizá al contemplarlo
yo perdí cierta esperanza,
y me invadió sin quererlo
el pesimismo,
quizá me atrapó la eternidad
de una condena,
o la amargura siempre espesa
de la tristeza…..
Ya que a pesar del amor
que me brindas
mi corazón es de escarcha,
y sin desearlo jamás
noto el temblor bajo mis pies,
y siento un frío intenso,
pues sé que mi voluntad
y esta juventud que poseo
como relámpagos en furia
están proclamando su adiós,
se escapan como mi inocencia
sin ningún miramiento,
huyen de mi aliento
sin compasión.
Mas comprendo que aunque
en estos momentos
se puedan tener mil y un motivos….
como la soledad y la muerte,
como una despedida
y tu olvido….
también entiendo
que mañana habrá un nuevo amanecer,
otra extraña y vibrante
emoción recorrerá mi pecho,
volverá a resurgir la ilusión,
caerá al abismo del tiempo perdido
todo el sinsentido,
y al fin encontraré en ti consuelo.
Y es que debo tolerar
que en ocasiones me pese la vida,
sin embargo tengo claro y sé,
que la amo, la necesito
y quiero vivirla.
Escrito el 25/05/2015.
Me gusta mucho
Me gustaMe gusta